Milei ganó las elecciones con la promesa de un ajuste a la casta. Sin embargo, rápidamente abandonó su propuesta y comenzó a descargar un ajuste brutal contra nosotros, los trabajadores. No sólo eso. A la casta no la tocó y se rodeó de ella para gobernar. A 60 días de su mandato, La Libertad Avanza lanzó un conjunto de medidas cuya consecuencia fue la pérdida del poder adquisitivo, la caída del consumo y el empobrecimiento de la población. Devaluó y el encarecimiento del dólar produjo rápidamente un incremento del precio del litro de nafta, que de diciembre a febrero aumentó más de un 100%.
A la devaluación le siguió el tarifazo. Aumentó el precio del transporte en el AMBA un 45% en enero y otro 250% en febrero. La garrafa de gas que utilizan las fracciones más pobres de la clase obrera incrementó su precio. Los servicios de luz, energía, telefonía celular, internet y las prepagas aumentaron en dos meses a cifras impagables (y lo seguirán haciendo). Y todos esos aumentos de precios no fueron acompañados por incrementos salariales. Al contrario, Milei recortó allí donde pudo. A los trabajadores que dependen del Estado Nacional les quitó partidas presupuestarias y no renovó contratos, despidiendo a obreros. Recortó a los ya empobrecidos jubilados y pensionados, redujo presupuesto en alimentos a comedores y programas sociales. O bien, recortó partidas presupuestarias como el FONID que afecta directamente a los docentes de las provincias.
La consecuencia fue la reducción notable de nuestra capacidad de compra a niveles del 2001 incluso en algunos sectores, como los obreros “en negro”, a cifras peores respecto del 2002. No es casual que la pobreza en enero llegue al 57,4%, a niveles cercanos a la peor crisis de los últimos 60 años.
Sin embargo, este ajuste no es nuevo. Recordemos que la población que reside en las provincias del interior del país paga el boleto de transporte mucho más caro desde hace varios años. A su vez, la informalidad laboral del 2003 a esta parte nunca bajó del 33%, por eso Cristina Kirchner finalizó su mandato en 2015 con más de 4 millones de asalariados “en negro”. Por su parte, la evolución del salario en lo inmediato muestra una pérdida del poder de compra que por lo menos se remonta a la devaluación que lanzó Kicillof en 2014. Incluso, el poder adquisitivo de los ingresos de los desocupados que perciben el plan Argentina Trabaja (impulsado por el kirchnerismo), que luego se llamó Hacemos Futuro (bajo el macrismo) y Alberto lo convirtió en el Potenciar Trabajo viene cayendo desde el momento de su sanción. Por su parte, los jubilados vienen perdiendo como en la guerra desde hace décadas. El gobierno de Alberto y Cristina les recortó por decreto tanto como lo hizo Milei.
La gente ya sabe que Milei vino por nosotros, por los trabajadores, a ajustarnos para degradar nuestras condiciones de trabajo, reducir (nuestro ya reducido) “costo” laboral, y esperar a que vengan los empresarios a invertir. Pero, si con toda la informalidad existente desde hace décadas, las reformas laborales que se implementan desde la última dictadura militar a esta parte y la tendencia decreciente de nuestros salarios los empresarios no invierten lo suficiente, entonces, no lo van a hacer ahora tampoco. Sólo buscan sus negocios rentables para llenar sus bolsillos de fortunas.
La población hoy repudia a Milei. Por eso las Asambleas votaron por un gran cacerolazo en Congreso. Y a la vez, la gente no quiere volver a los gobiernos anteriores. Los que nos dejaron en la ruina y con los cuales ya no llegábamos a fin de mes. Por ello debemos pensar y proponer una alternativa a todos los gobiernos que nos vienen ajustando desde hace décadas. A esta apertura de sesiones ordinarias en el Congreso debemos oponerle un verdadero órgano de poder de la clase obrera y construir una Asamblea Nacional de Trabajadores ocupados y desocupados.
Que este gran cacerolazo del 1ro de marzo sea el puntapié inicial para repudiar la política de Milei y la de quienes nos gobernaron hasta ahora sin resolver nuestros problemas:
• Fuera Milei del gobierno;
• Que se vayan todos;
• Por la construcción de una Asamblea Nacional de Trabajadores ocupados y desocupados que sirva como herramienta de organización, de lucha y de debate programático.
• Por una salida socialista.
Concentramos el viernes 1ro de marzo en Rivadavia y Montevideo a las 20,30hs.
Vía Socialista
2 comentarios en “Para echar a Milei: por un gran cacerolazo en Congreso”
LO QUE UDES PLANTEAN LO VENGO OBSERVANDO DESDE HACE MUCHOS AÑOS, COMO SIMPLE CIUDADANO, NUNCA PARTICIPE EN POLITICA, AHORA ESTOY AFILIADO A UDES,POR ESO CREO QUE DE ESA ASAMBLEA DE IZQUIERDA QUE MENCIONAN DEBE SALIR UN FRENTE DE IZQUIERDA IMPORTANTE, PARA PRESENTAR COMO ALTERNATIVA LA PROPUESTA DE ARGENTINA 2050 , QUE UDES EN 150 PAGINAS EXPONEN CON CLARIDAD DESDE ABRIL DE 2022 SI MALNO RECUERDO…VIA SOCIALISTA Y SU GENTE ,DEBE SER UNA ALTERNATIVA ,PARA TENER EN CUENTA EN 2025 ….SUERTE Y GRACIAS
Disculpen que reitere el concepto, trate de leer los medios periodisticos, la conclusion es que :
O la izquierda hace la revolucion tan mentada ,o se unen para ofrecer a la ciudadania, el programa 2050, ya en poco tiempo…. descartada la revolucion ……tal camino es en mi opinion ,el unico que queda como algo viable para el ciudadano, que no es liberal ni populista…..el LLA y el PRO, se encuentran comodos en esa situacion, el peronismo con la izquierda no va. Por lo tanto la izquierda, tambien debe tomar una decision audaz y lanzar ya 2050……para ser una opcion entre ,el liberalismo mas los conservadores y un sector probable de radicales y por otro el populismo peronista mas una parte probable de radicales….. si no se toma cuenta de este estado de cosas el sistema capitalista se recompone ….con estas posibilidades o algo parecido y la izquierda sigue no nata , admito criticas por que a penas son un jubilado ….trato de expresar mi idea lo mas claramente….pero hay en todo el sistema politico una gran desconfianza unos a otros y la izquierda va a salir perdedora como casi siempre….suerte, como nunca fui politico no tengo reparos en expresar lo que pienso